Isaías 48:17.

El anhelo de Dios con el hombre siempre ha sido el poder tener una relación no solo de Padre a Hijo, sino también de amistad y de intimidad, el ejemplo claro Abraham al cual lo llamó “Abraham mi amigo”, esta escrito en Isaías 41:8 “Pero tú, Israel, siervo mío eres; tú, Jacob, a quien yo escogí, descendencia de Abraham mi amigo”, y una de las grandes cualidades de Dios es que le gusta hablar con sus siervos y que sus siervos hablen lo que Él quiere hablar.

El problema es que ese nivel de intimidad se ha perdido en la iglesia de hoy; el conocimiento inundó el corazón del hombre hasta tal punto que dejó a un lado lo más importante “su relación personal con Su creador”.

Cada palabra escrita que viene de Dios, cada palabra de Dios revelada a los hombres es Palabra firme que se cumple porque está escrito en Números 23:19 "Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?”, el problema es que Dios está buscando oídos espirituales que oigan lo que Él quiere hablar y una boca llena del Espíritu de Dios para que hable lo que el quiere hablar y pueda decir… “Así ha dicho Jehová…”, el quiere usar tu boca para hablar a Su Iglesia comenzando por tu vida, tu familia y tu descendencia, ya que en estos tiempos de problemas y dificultades Dios quiere meter Su mano poderosa para restaurar, restituir, sanar, bendecir, prosperar y tu puedes ser parte de la solución; 

Cuando leo la Biblia me encuentro con hombres y mujeres que traían soluciones a los problemas de la gente y esas soluciones verán de parte de Dios: Moisés, Josué, Elías, Eliseo, Isaías, Jeremías, Ezequiel; en fin muchos hombres y mujeres fueron usados de manera sobrenatural para que a través de una Palabra que el Señor hablaba a través de ellos, a través de la expresión “Asi ha dicho el Señor”, viniese una advertencia, una solución a cualquier problema por difícil que fuera.

En el nuevo testamento veo que donde Jesús llegaba y había un problema, Él lo solucionaba, lo sanaba y lo arreglaba, por lo tanto tu y yo debemos ser la solución de los problemas que la humanidad está enfrentando en estos tiempos.

Por tal razón alineate con el corazón de Dios, párate firme para que comiences a ser usado por Dios y puedas decir “Así ha dicho el Señor… “; entonces Dios te va a prestar Su Poder para que se haga a través del Espíritu Santo; escuche esto: "Yo estoy aquí porque estoy pastoreando lo que mas ama Dios: Tu vida, tu familia y tu descendencia, te invito a que hagas lo mismo…”.

Si tengo una palabra de parte de Dios, esa palabra hará que todo salga bien; a esa Palabra se va a alinear todo lo que me rodea, a esa Palabra se va a alinear todo recurso, escucha esto: “bajo ninguna circunstancia ni concepto pierdas tu fe”, porque una sola Palabra basta para determinar cual será el final de tu situación, está escrito en Salmos 34:19 “Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas me librará el Señor”. 

Lo que vas a necesitar es una fe genuina, una fe viva que produce vida, mientras que una fe muerta produce muerte, una fe que espera en Dios; tu puedes vivir por la fe humana o por la fe basada en la Palabra de Dios, confiando en Dios y en Su Palabra, confiando en lo que Dios ha dicho; a Dios le gusta que confíen en Él, Hebreos 11:6 y los que confían en Él son dichosos, Jeremías 17:7-8, Salmos 146:5-9.

Y te reitero la iglesia de Cristo debe ser parte de la solución, y quiero traer un ejemplo claro en el libro de 2 Reyes 4:38-41, varias cosas de este suceso me llaman la atención:

1. Había una gran hambre en la tierra y estaban reunidos Eliseo con sus discípulos, los hijos de los profetas y en medio del hambre mandó a colocar una olla grande y mandó a hacer un potaje… de que? Si había una gran sequía sobre la tierra; así actúan los profetas, sus ojos ven más allá de las circunstancias.
2. Y salió uno al campo y recogió parra montés; es la planta de la uva, sus hojas sirven para comer, tienen un sabor amargo, mis abuelos hacían malfú, eran hojas de parra que envolvían una mezcla de alimentos y calabazas silvestres.
3. Cuando comenzaron a comer del guisado, vino palabra de ciencia y gritaron “Varón de Dios, hay muerte en esa olla”… Aquí se muestran 4 dones del Espíritu Santo, En la Biblia encontramos tres listas principales de dones: 1 Corintios 12:4-11, Romanos 12:6-8. Todos lo que hemos recibido a Cristo en nuestro corazón y hemos sido investidos y transformados por Su espíritu Santo tenemos por lo menos un don y el Espíritu Santo distribuye los dones según quiere: «Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte a cada uno según él lo determina» 1 Corintios 12:11.

Veamos los dones del Espíritu manifiestos en 2 Reyes 4:38 en adelante…

1. Don de Ciencia: “Hay muerte en la olla”, es el don que “Sabe algo”, porque el Espíritu de Dios lo dice y sabes algo que el resto de la gente no sabe, el Espíritu de Dios revela lo que la gente no sabe.
2. Don de Sabiduría: Cuando tu sabes algo que está mal, el Espíritu Santo te da la sabiduría para arreglarlo, la sabiduría de Dios sana, restaura, bendice, “Coloquen harina en la olla”. 
3. Don de Fe: Cuando podemos creer algo que en nuestra propia fuerza no podemos hacer, es la fe de Dios que se derrama sobre todos y todos creen en lo mismo y se hace; la solución está en lo sobrenatural, solo Dios puede resolver tu problema.
4. Don de Milagros, Sanidades y Prodigios: Dios utilizó harina para traer sanidad a la olla, para traer vida a una olla que tenía espíritu de muerte. La finalidad de los problemas es que éstos engendran milagros y los milagros engendran maravillas y las maravillas engendran gloria, y la gloria engendran milagros y milagros y milagros y la fe sigue aumentando y vivimos de gloria en gloria y de victoria en victoria… Fe Sobrenatural, 2 Reyes 4:42-44.

Los dones no se nos dan como un premio a nuestra espiritualidad, Dios nos los regala para que seamos parte de la solución a los problemas de la humanidad y para mostrar el poder de Dios y todos crean en Él, al usarlos de forma correcta mostramos que Dios es real en nuestras vidas y que es él quien nos dirige.

Hoy El Espíritu Santo te va a enseñar y te va a guiar para que comiences a desarrollar los dones espirituales los cuales se obtienen POR MEDIO DE LA FE, por lo tanto tienes que aprender a:

1. Usar el lenguaje del Espíritu, para hablar lo que el Espíritu te dice que hables.
2. Separar lo espiritual de lo natural.
3. Desarrollar el don de Fe.
4. Desarrollar y utilizar el discernimiento espiritual, esto es comenzar a experimentar los sonidos espirituales, poder ver con tus ojos espirituales; los ojos espirituales son como una cámara fotográfica, la única manera de tomar la imagen que tienes en frente es cuando el lente se abre y deja pasar la luz, sin luz no hay imagen, por lo tanto tu y yo necesitamos la luz de Cristo, esto es la Palabra de Dios y la oración, esos tiempos a solas con Él, en intimidad con Él.