¿Tu corazón está latiendo con el corazón de Cristo y sus deseos son tus deseos, o estás siendo egoísta y preocupándote solo por lo que tu quieres? La lealtad a Cristo requiere un compromiso de hacer su voluntad. Requiere obediencia a sus mandamientos. Resulta en un corazón que late con el corazón de Cristo para salvar a los perdidos. Da prioridad a las cosas que él prioriza.