Los científicos trabajan en ello. Uno de los proyectos más realistas es el propuesto por el ingeniero francés Jean-Yves Prado del Centro Nacional de Estudios Espaciales (CNES) en Francia, que ha elaborado un plan muy interesante para alterar la órbita de Apofis, un asteroide potencialmente muy peligroso, ya que periódicamente pasa cerca de la Tierra. Los astrónomos han calculado que este trozo de roca de 270 metros de largo pasará nuevamente rozando nuestro planeta el 13 de abril de 2036. Si fuésemos capaces de alterar aunque sea una fracción de grado su dirección, la amenaza desaparecería.
Para lograrlo, el ingeniero francés propone llevar una verdadera flota de sondas robóticas a las inmediaciones de Apofis y una vez allí desplegar velas solares que, al protegerlo de la radiación solar, cambiarán el curso del asteroide . A diferencia de casi todas las demás propuestas, el proyecto de Jean-Yves Prado no implica ningún tipo de impacto, explosión o empuje sobre el asteroide. El principio de funcionamiento de este plan es mucho más sutil, y se basa en eliminar el llamado efecto Yarkovsky , denominado así en honor a su descubridor, el ingeniero ruso Ivan Osipovich Yarkovsky.