Nuestro Señor Jesucristo merece toda la gloria por su grandeza en perfecta servitud.
Versículo Clave: "Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos." Mark 10:45
Nuestro Señor Jesucristo es el perfecto ejemplo de grandeza por su:
1. Humildad voluntaria.
2. Sacrificio costoso.
3. Generosidad incondicional.