No queda muy claro cuáles son los planes de Qatar tras el fin de la cita mundialista. 8 estadios quedarán huérfanos tras meses de esfuerzo para levantar una infraestructura en tiempo récord a un costo humano altísimo y una inversión exorbitante. Algunos analistas consideran que en el país se ha construido una manada de "elefantes blancos".